jueves, 6 de enero de 2011

Liberaron a los obreros esclavizados

PUBLICADO EL 6 DE ENERO DE 2011 EN TIEMPO ARGENTINO


VOLVIERON A SANTIAGO DEL ESTERO

Por Damián Pussetto

dpussetto@tiempoargentino.com.ar


Son 69 personas halladas en un campo de San Pedro. El fiscal Giagnorio hizo dos denuncias más. Ya hay 12 imputados.
 

Los 69 trabajadores hallados el martes en un campo de la firma Southern Seeds Production (SSP) en muy malas condiciones de salud e higiene arribaron a un acuerdo ayer para el pago de sus salarios e inmediatamente volvieron a Santiago del Estero, tal como hicieron los 120 detectados el 30 de diciembre en un paraje cercano de la empresa Nidera.
Se efectuó el pago de $ 110 por jornal, y a las 22:00 los trabajadores, que no sabían que habían sido trasladados a la provincia de Buenos Aires, partieron desde la terminal de Retiro con los pasajes que aportó la cartera laboral.
Las detecciones generaron una causa penal por “reducción a servidumbre”, que instrumentó el fiscal Ruben Darío Giagnorio de la UFI 6 y, además, el trámite administrativo por infracción a leyes laborales y normas de salud e higiene, en el ministerio.
En la causa declararon ayer los cinco involucrados de SSP, por lo que hasta el momento son 12 los imputados. Al mismo tiempo, Giagnorio presentó denuncias en la Justicia Federal sobre otros dos campos. Luego de la feria judicial, ese sería el destino de la investigación que lleva adelante, por cuanto el delito de trata de personas es de competencia federal y podría tanto inhibirse como serle requerido a ese fuero lo actuado.
Ayer, el fiscal le adelantó a Tiempo Argentino que lo que observó es “mucho más grave de lo que pensaba en principio”.
A la par, la intervención del ministerio es la que permitió que ambos establecimientos tengan faja de clausura, que sean pasibles de multas de hasta $ 5000 por cada empleado y que ellos puedan retornar a sus lugares de origen respetando un protocolo firmado entre la Nación y las provincias.
El ministro de Trabajo bonaerense, Oscar Antonio Cuartango, le explicó a este diario que “se tiene la presunción de que todos estaban en negro. Pero no es una verdad absoluta, las firmas disponen de cinco días hábiles para presentar los registros laborales, y  es factible que los tengan. Lo cierto es que al momento de las inspecciones, nadie exhibió un documento que lo uniera legalmente con la empresa. Independientemente de eso, es incontrastable que se trata de trabajo esclavo y que no podrán desvirtuarse las infamantes condiciones que registramos. Las tareas se realizaban de sol a sol, de lunes a lunes, en lugares vergonzosos, sin privacidad, higiene y seguridad. Manipulaban agrotóxicos sin guantes y, todavía más, los envases de esos productos se utilizaban como muebles para apoyar cosas. Eso no se va a desvirtuar en un trámite administrativo.”
Las irregularidades descubiertas en las inspecciones, a la que se agregó una tercera el lunes, impulsada por la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE), tendrán que ser subsanadas totalmente para que la actividad retorne.
“Si desean reanudar la tarea –aseguró Cuartango–, deberán cumplir con la ley. La lucha contra el trabajo no registrado es intransigente y preservar la vida no admite concesiones. Estamos dispuestos a hacer operativos conjuntos con el ministerio nacional y esto ya lo hablé con Carlos Tomada, que nos dio su apoyo. Esto excede las competencias. Se trata de humanidad. Es infame la condición en la que estaba esta gente.”