El gigante tecnológico admite su derrota con el viejo y rechazado IE y trata de recuperar el terreno perdido con el Spartan, que incluirá nuevas formas de interactuar en Internet.
Publicado en TIEMPO ARGENTINO el 8 de abril de 2015
En viaje hacia un destino irreversible, el archifamoso Explorer va camino a convertirse en una pieza en desuso. Microsoft descorrió el velo del secreto más mentado y muestra en trazos gruesos la versión beta del Project Spartan, que se incluirá en el Windows 10 y jubilará al siempre cuestionado IE.
Superado por versiones libres, el navegador cayó rotundamente luego de estar presente en el 95% de las computadoras en 1999. Hoy exhibe un escueto 30%, con tendencia en baja.
Conocido el problema, los gerentes de la compañía gigante, que acaba de celebrar sus 40 años, pusieron las barbas de don Bill Gates en remojo y mostraron el pulgar para abajo firmando la sentencia. Y para todo el que quisiera escuchar, aún con dudas y con la versión primitiva apenas terminada, gritaron a viva voz una promesa, casi un juramento: "El nuevo navegador será… ¡rápido!". Es que el viejo explorador termina sus días como una imagen desdibujada de sí mismo, esperando y esperando y esperando para presentar datos, por mínimos que sean.
Si logra ese cometido y entusiasma a los interesados, ellos verán un avance que se ofrece como grande. Se trata de la posibilidad de escribir o teclear de manera directa en las páginas de Internet, comentar situaciones de interés o crear un clip y compartir la "nota web" a través de un correo electrónico o una red social.
Invisible para la mayoría, quizá en el nuevo motor de procesamiento se encuentre la mejor ventaja. El resto de lo presentado a la fecha podrían ser simplemente chiches que embellezcan.
En ese orden aparecen Cortana, la asistente virtual para control de voz que ayuda en búsquedas y hace sugerencias y las listas (Reading List) que permiten marcar lecturas para hacerlas más tarde e incluye un modo Reading View que mantiene enfocado el contenido de la página.
La expectativa es enorme en Redmond, Washington, y Joe Belfiore, vicepresidente corporativo del Grupo de Sistemas Operativos en Microsoft, le puso palabras: "Después de todo, el mundo en el que vivimos evoluciona, la Web evoluciona y nuestras necesidades, también."
Hasta el momento, tanto Spartan como Windows 10, han sido probados internamente y hace unos pocos días se pasó a la siguiente etapa, la de ofrecer versiones beta para todo aquel que lo desee.
Sin embargo, el mero anuncio generó una conmoción que recorrió el planeta en segundos y la empresa debió salir a aclarar dos malos entendidos. Justamente, Belfiore detalló que se seguirá brindando soporte por un tiempo indefinido a los usuarios que tengan el viejo Explorer. El segundo tuvo que ver con una bomba que dio vuelta al mundo, pero se diluyó. No. Definitivamente, no. Los muchachos de Bill Gates no pensaron jamás ofrecer Windows 10 de manera gratuita.
Cierto es que, detrás de lo que para un simple consumidor podría verse como una lavada de cara o un nombre más atractivo nada más, la oferta pareciera ocuparse de agradar específicamente a quienes han sido detractores consuetudinarios del Explorer. Es decir, los "nerds", especialistas, entendidos y del palo. Para ellos, una bella música resonará en sus oídos al comprobar que trae Flash integrado y no habrá que descargar el complemento y que consume poca memoria RAM. Dos incorporaciones muy promisorias para una etapa tan embrionaria.
Microsoft es por el momento muy cuidadoso con los plazos hacia el futuro. No obstante, un dato cierto es que los Windows 8 y 8.1 se quedarán sin soporte durante 2015 o quizá 2016 con algún parche.
En definitiva, lo que la empresa oculta es la intención. Ninguno de sus productos enamora. Pueden ser potentes, eficaces, instalarse sin que el usuario lo sepa, pero no encantan, ni generan fanáticos como tantos otros en el ámbito tecnológico. Hacia allí van, entonces, las huestes de Gates. Más que a reemplazar al arcaico Explorer, a tratar de estamparse en alguna remera. No se sabe si lo conseguirán, pero al menos irán más rápido. «
Superado por versiones libres, el navegador cayó rotundamente luego de estar presente en el 95% de las computadoras en 1999. Hoy exhibe un escueto 30%, con tendencia en baja.
Conocido el problema, los gerentes de la compañía gigante, que acaba de celebrar sus 40 años, pusieron las barbas de don Bill Gates en remojo y mostraron el pulgar para abajo firmando la sentencia. Y para todo el que quisiera escuchar, aún con dudas y con la versión primitiva apenas terminada, gritaron a viva voz una promesa, casi un juramento: "El nuevo navegador será… ¡rápido!". Es que el viejo explorador termina sus días como una imagen desdibujada de sí mismo, esperando y esperando y esperando para presentar datos, por mínimos que sean.
Si logra ese cometido y entusiasma a los interesados, ellos verán un avance que se ofrece como grande. Se trata de la posibilidad de escribir o teclear de manera directa en las páginas de Internet, comentar situaciones de interés o crear un clip y compartir la "nota web" a través de un correo electrónico o una red social.
Invisible para la mayoría, quizá en el nuevo motor de procesamiento se encuentre la mejor ventaja. El resto de lo presentado a la fecha podrían ser simplemente chiches que embellezcan.
En ese orden aparecen Cortana, la asistente virtual para control de voz que ayuda en búsquedas y hace sugerencias y las listas (Reading List) que permiten marcar lecturas para hacerlas más tarde e incluye un modo Reading View que mantiene enfocado el contenido de la página.
La expectativa es enorme en Redmond, Washington, y Joe Belfiore, vicepresidente corporativo del Grupo de Sistemas Operativos en Microsoft, le puso palabras: "Después de todo, el mundo en el que vivimos evoluciona, la Web evoluciona y nuestras necesidades, también."
Hasta el momento, tanto Spartan como Windows 10, han sido probados internamente y hace unos pocos días se pasó a la siguiente etapa, la de ofrecer versiones beta para todo aquel que lo desee.
Sin embargo, el mero anuncio generó una conmoción que recorrió el planeta en segundos y la empresa debió salir a aclarar dos malos entendidos. Justamente, Belfiore detalló que se seguirá brindando soporte por un tiempo indefinido a los usuarios que tengan el viejo Explorer. El segundo tuvo que ver con una bomba que dio vuelta al mundo, pero se diluyó. No. Definitivamente, no. Los muchachos de Bill Gates no pensaron jamás ofrecer Windows 10 de manera gratuita.
Cierto es que, detrás de lo que para un simple consumidor podría verse como una lavada de cara o un nombre más atractivo nada más, la oferta pareciera ocuparse de agradar específicamente a quienes han sido detractores consuetudinarios del Explorer. Es decir, los "nerds", especialistas, entendidos y del palo. Para ellos, una bella música resonará en sus oídos al comprobar que trae Flash integrado y no habrá que descargar el complemento y que consume poca memoria RAM. Dos incorporaciones muy promisorias para una etapa tan embrionaria.
Microsoft es por el momento muy cuidadoso con los plazos hacia el futuro. No obstante, un dato cierto es que los Windows 8 y 8.1 se quedarán sin soporte durante 2015 o quizá 2016 con algún parche.
En definitiva, lo que la empresa oculta es la intención. Ninguno de sus productos enamora. Pueden ser potentes, eficaces, instalarse sin que el usuario lo sepa, pero no encantan, ni generan fanáticos como tantos otros en el ámbito tecnológico. Hacia allí van, entonces, las huestes de Gates. Más que a reemplazar al arcaico Explorer, a tratar de estamparse en alguna remera. No se sabe si lo conseguirán, pero al menos irán más rápido. «
Un rival muy poderoso
Lanzado en septiembre de 2008, el Google Chrome le dio el golpe de gracia al Explorer por sus ventajas y la facilidad para navegar, que encantó a la gente. Aportó una barra de direcciones que trabaja de una manera diferente a lo que lo hacen en otros navegadores porque actúa como un buscador. Además, fue muy importante la facilidad con la que se puede interactuar con otras herramientas de Google, como el Translate. Pero, sin ninguna duda, el Chrome aventajó a sus rivales con la extraordinaria velocidad de carga, debido a la poca memoria que utiliza para funcionar. Sin embargo, uno de sus mayores problemas es la compatibilidad con las páginas web.
Es muy probable que no sea compatible con páginas que hayan sido creadas con anterioridad a su creación, que son muchas.
Es muy probable que no sea compatible con páginas que hayan sido creadas con anterioridad a su creación, que son muchas.
Seguro y confiable
Firefox fue creado por David Hyatt y Blake Ross como una rama experimental del proyecto Mozilla, por lo tanto, software libre. Su gran ventaja es la facilidad para personalizar las extensiones. Cuenta con 6000 extensiones y más de 500 temas.
Otro punto a favor es la seguridad. Firefox introdujo numerosas características que protegen de esquemas de phishing, virus y demás fraudes comunes. El navegador incluye un bloqueador de pop-up poderoso y protocolos de autenticación fuertes que evitan que los atacantes manejen códigos no autorizados cuando se navega.
Asimismo, la seguridad de Firefox se puede aumentar enormemente con extensiones como NoScript y FlashBlock que te permiten que ejecutes selectivamente códigos avanzados en sitios web.
Otro punto a favor es la seguridad. Firefox introdujo numerosas características que protegen de esquemas de phishing, virus y demás fraudes comunes. El navegador incluye un bloqueador de pop-up poderoso y protocolos de autenticación fuertes que evitan que los atacantes manejen códigos no autorizados cuando se navega.
Asimismo, la seguridad de Firefox se puede aumentar enormemente con extensiones como NoScript y FlashBlock que te permiten que ejecutes selectivamente códigos avanzados en sitios web.
Para testearla
La versión beta de Windows 10, con el Projet Spartan, puede bajarse gratuitamente desde el sitio de Microsoft en la dirección: http://windows.microsoft.com/en-us/windows/preview-download
